Un fin de semana con mucho juicio

Hemos pasado un fin de semana muy intenso y ajetreado, es de justicia que os lo cuente resumido en esta entrada.

El sábado fuimos al parque de bolas a celebrar el cumpleaños de Parrulín con los niños de su clase. Veinte niños y tres madres, locura total! Los niños lo pasaron fenomenal, Parrulín estaba super contento, muy nervioso, quería ser el primero en llegar, que por algo era el cumpleañero! Jugaron como locos, todo el rato corriendo, saltando, gritando... lo normal, vamos! La merienda estuvo muy bien, los niños comieron poco porque estaban más interesados en seguir jugando. Ni corta ni perezosa aprovechó esta estupenda mujer que escribe para coger un plato y dar buena cuenta de la tarta sobrante, y mi santo, de las mediasnoches sobrantes. Al principio con verguenza, luego con voracidad, y por último con avaricia ya que me guardé unos barquillos en el bolso, para luego. Ultimamente tengo la canina, que decía mi madre, cuidar a tanto niño me daba mucha hambre. Y es que tuvimos de todo, el niño alérgico con comida especial que hay que vigilar, la niña que llora que hay que consolar, los niños que se pelean que hay que mediar, el niño que me provoca llamándome zombie que hay que perseguir, la niña que se cae que hay que curar... incluso la niña que vomita! Porque nos dejaron a una avisando que llevaba todo el día vomitando, que si volvía a vomitar que llamaramos para que vinieran a buscarla. Yo no la hubiera dejado. Qué poco juicio!

Juicio? Juicio? Eh! Os lo he dicho? Que he ganado el juicio! Mi despido es NULO! Toooma!

El domingo fuimos al rastro a cambiar cartas. Un millón de niños en dos metros cuadrados de sombra, locura total! Parrulín feliz cambiando cromos, yo asfixiada de calor, la niña también, mojando a Xoubiña con el bibe de agua, persiguiendo al mayor con el carrito, cogiendo las "repetitis" con una mano, las "noles" con la otra... Hala, todas las cartas al suelo! Niño ven a la sombra! Dónde está el niño? Hala, todas las cartas al suelo! Que con ese ya has cambiado! No, ese niño no es mío, el mío es el de verde. Hala, todas las cartas al suelo! Ven que te sangra la nariz! No, que esas no son las tuyas! Hala, todas las cartas al suelo! Ay qué estrés y qué calor hacía! En verano no debería ir al rastro nadie que estuviera en su sano juicio.

Juicio? Juicio? Eh! Os lo he dicho? Que he ganado el juicio! Mi despido es NULO! Toooma!

Por si fuera poco, por la tarde me voy con los dos a la piscina, que ya son ganas. Con los dos, locura total! Xoubiña iba por primera vez. Espera que tengo que poner la toalla! Espera que tengo que poner la de la niña! Espera que la mía también! Espera que hay que poner la crema! Espera que tengo que echársela a la niña! Espera que a mí también! Espera que tenemos que ir juntos! Allí, los tres, a la piscina infantil. Al principio Xoubiña estaba un poco insegura en la piscina de niños, se agarraba mucho a mí, pero no lloraba ni nada. Le gusta mucho el agua, tanto que en su bautizo si me descuido se tira al pilón. Al cabo de un rato ya estaba disfrutando sentadita en el agua, mientras que el otro hacía rato que estaba peleándose por una pistola de agua que no era suya. Yo asfixiada y con un dolor de muelas... Nos vamos a la piscina grande. Espera que hay que poner los manguitos! Espera que hay que ponerle los manguitos a la niña! Espera que... ah, no, yo no llevo manguitos. Hala, vamos a la grande. Parrulín con sus super manguitos que no se hunde pero tiene miedo y hay que agarrarlo, Xoubiña con sus super manguitos que no se hunde pero hay que agarrarla. Sujetando a uno, sujetando a la otra, secando a uno, secando a la otra, merendando el uno, meriendando la otra, uno que quiere un helado, otra que quiere teta. Yo asfixiada, agobiada y con dolor de muelas. Es que además me está saliendo una muela del juicio.

Juicio? Juicio? Eh! Os lo he dicho? Que he ganado el juicio! Mi despido es NULO! Toooma!

Me meto en cada embolado! Que es que me meto yo sola, que no paro de hacer planes con dos. Lo mismo me voy a un cuentacuentos con los dos, que al notario, que a la piscina, que a Galicia en autobús, que a lo que se tercie. Luego me agobio, me estreso, juro que es la última vez que hago algo así, pero voy resolviendo los problemas según se van presentando, luego se me olvida lo malo y repito la experiencia. Juro que no volveré al rastro con los dos, que no volveré a la piscina con los dos. Pero esto es como las resacas adolescentes de los domingos, que juras no volver a beber y en cuanto se pasa el dolor de cabeza se te olvida. Volveré al rastro y la piscina por mucho que ahora mismo lo ponga en tela de juicio.

Juicio? Juicio? Eh! Os lo he dicho! Que he ganado mi juicio! Mi despido es NULO! Toooma!

Y es que el viernes tuve que ir a correos a recoger la sentencia del juicio. Estaba de los nervios, no me atrevía a abrir la carta, buscaba un lugar tranquilo para sentarme a leerla, que igual si la leo de pie es peor y tuve que recorrer muuuuchos bancos hasta encontrar uno vacío. Entre jubilados y parados encontrar un banco libre por la calle se está volviendo complicado. La abro, voy directamente al final, al fallo. [...] declarando la nulidad del despido y condenando a la inmediata readmisión en las mismas condiciones existentes con anterioridad al despido, con abono de los salarios dejados de percibir desde el despido [...] Toooma! Lloro, río, me da el ataque de nervios, llamo por teléfono, mando wachaps... Toooma! Ahora sólo me queda esperar a ver si me readmiten, o me indemnizan más, o recurren la sentencia y lo llevan al supremo y tenemos que volver a juicio.

Juicio? Juicio? Eh! Os lo he dicho! Que he ganado mi juicio! Mi despido es NULO! Toooma!

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.