miércoles, 20 de abril de 2011

Maletas, nervios y nihilismo infantil

La verdad, que no sé cómo me he metido en este lío. A ver si van a tener razón mi madre y mi santo cuando me decían que si estaba loca por llevarme al niño en autobús por la noche. En estos momentos estoy francamente nerviosa y preocupada.
Ayer lo recogí en la guardería y estaba el niño de “no”. Era su respuesta para todo. Episodio nihilista que dice mi santo.
Intenté que me contara cómo se sentía, para ver si le podía ayudar a sentirse mejor (y a mí también porque me estaba poniendo de los nervios) “Estoy triste” Vaya, cuanto lo siento, y por qué? “Porque si” Eso no es ninguna razón. “Pues porque sí” Has tenido un día duro en el cole? “Si, un día duro” Vaya, y qué has hecho hoy? “Pues… jugar a la torre con mis amigos” Eso es lo que siempre me responde, así que no conseguí saber qué le había pasado. Creo que hoy su profe no estaba, los niños eran menos, seguramente habrán juntado a los de la otra clase, se ha roto su rutina y nota nerviosismo en casa.
Cuando esto sucede no le doy opción a decir que no, sino que le ofrezco dos alternativas. Pues vaya tarde me dio! A ver Parrulín, quieres ir a casa en autobús o en metro. “En autobús” De acuerdo. Llegamos a la parada “Nooo, nooo, en autobús nooo” Vale, pues vamos en metro. Ascensor o escaleras? “Ascensor” De acuerdo. “Nooo, ascensor nooo” Así estuvimos toda la tarde. Un enorme ejercicio de paciencia para mí, que procuro no perder la serenidad en ningún momento, pero a veces me supera.
Hacer la maleta fue toda una odisea, aunque hoy tengo toda la tarde libre para hacerla, pero prefería ser previsora y dejarla hecha ayer, por lo que pudiera pasar. Y porque el plan era llevarlo al parque toooda la tarde para desfogarse y cansarse lo máximo posible. En fin, ha amanecido lloviendo, así que no sé qué voy a hacer esta tarde.
Me pone muy nerviosa hacer la maleta, sobre todo para Semana Santa, porque en verano metes de todo y ya está. Y si se te olvida algo lo puedes comprar. Pero Semana Santa son cuatro días con todo cerrado! Y a mi pueblo no han llegado aún los chinos, qué ya es raro. Pero benditos chinos la de apuros que me han sacado.
Pues todo el rato enredando, metiéndose entre mis piernas, cogiendo la ropa, desdoblando lo que ya había elegido, cambiándola de sitio, exigiendo que fuera a jugar con él al salón… A ver, cariño, ahora mismo no puedo porque tengo que prepara la maleta. Me ayudas? Normalmente la mejor forma es que participe en las tareas, suele decirme que sí, le hace sentirse útil y en lugar de enredar me trae un calcetín o algo similar. Conseguimos hacer las tareas aunque sea más lentamente. “Nooo, no te ayudo” Vaya, mi gozo en un pozo. Esta vez no sirve, qué raro.
Es extraño que Parrulín esté inaguantable, porque no había otra palabra para describirlo. Se pasó toda la tarde bebiendo agua, muchísima, tal vez le dolía la barriga, antes o después. A última hora me pareció que tenía fiebre, pero mi santo decía que no, él sabrá que para algo es médico. Total, que además a lo mejor me lo llevo malito. Instinto de madre o instinto de médico? Cual seguimos? Mira, yo por si acaso ya he metido medicinas en la maleta, que más vale que sobren a que falten. Aunque por mucha fiesta que sea, las farmacias siempre funcionan.
No quiso cenar. Quiso irse directamente a la cama. Con un cuento, eso no lo perdona. Le dije que uno pequeño y me trae el más grande que encuentra! Parrulín, este no, te he dicho que uno pequeño. “Pues yo quiero este, tú verás” Me quedé alucinada. Tú verás como expresión copiada de mí cuando le doy a elegir? Tú verás como amenaza? Tú verás como la que te voy a liar? Cedí y se lo leí. Al final la verdad es que se durmió enseguida, después del cuento, de unos abrazos y unos besos, quiso que le dejara en la cunita y no duró ni cinco minutos despierto.
Tengo miedo a lo que pueda pasar esta noche. Más que por mí por el resto de los pasajeros, obviamente. Aunque también tengo miedo por mi paciencia. Duerme con pañal pero en realidad se despierta alguna vez y exige ir al baño, así que amanece seco todos los días. Está claro que viajará con pañal, espero que no le dé por ir al baño del autobús continuamente. Porque seguro que le gusta el descubrimiento y pretende ir cada dos por tres.
Llevo mi querido mei-tai por si acaso cuando lleguemos está dormido, quiere brazos y tengo que llevarle a él y a la maleta. Aunque hace casi un año que no lo uso y no sé si podré con su peso. Mira que he ido veces en autobús a Galicia! Pues de todas ellas, tan sólo en una ocasión funcionaba el ascensor, las escaleras mecánicas nunca jamás.
Me apena enormemente dejar a mi marido, que sí, que ya sé que son cuatro días, pero hace ya muchos años que viene conmigo en Semana Santa y le voy a echar mucho de menos. Voy a echar de menos no estar en mi casa y estar en la de mi madre. Voy a echar de menos los vinitos y los aperitivos con él. Voy a echar de menos verle cuidando el jardín. Voy a echar de menos verle dando un paseo por la playa y cogiendo piedritas. Voy a echar de menos su compañía, su apoyo, su amor, el tiempo que pasa con el niño, las veces que se levanta él por la noche…
Ay Dios mio en qué lio me he metido! En fin, que iremos resolviendo los problemas según se vayan presentando. A lo mejor puedo escribir un post contando cómo fue, pero no aseguro nada. No me olvidéis!
Felices vacaciones!
Sean buen@s y felices!

8 comentarios:

  1. Nena, no solo no te voy a olvidar, es que me has transmitido tu nerviosismo, y seguro que esta noche me acuerdo de vosotros, ojalá te vaya bien el viaje nocturno...si no es así, seguro que nos espera un buen relato el próximo día, con tu sentido del humor para contar las cosas...
    pásate por tu e.mail...

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  2. Ay omá, espero que vaya bien, de verdad. Demosle un voto de confianza al enano. Respecto al instito de madre o el de médico, yo me decanto por el de madre a no ser que seas demasiado histérica. Mi churri también es médico y con su hija acierta menos que una escopeta de feria jejej menos mal que la pobre no se pone casi nunca mala jejejej. Su jefe le dijo un día delante mía "tú en casa eres padre y marido no médico y siempre hazle caso a la mamá que es raro que se equivoquen. Cuando dudes, te traes a la niña y que la mire algún compañero" eso fue despues de ir a urgencias porque yo decía que algo le pasaba en el ojo y efectivamente tenía una ulcera en la cornea que solo se la vieron con el liquido de contraste. Un besazo fuerte guapa. Cuentanos que tal os va esta noche vale?

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  3. Sinceramente, espero que se quede frito en cuanto llegue al bus... Ánimo que verás como sale bien!

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  4. MdB, al final tomarlo a risa es la mejor de las opciones, si me vuelve loca ya os reireis, ya, no lo dudes, del post y de mi! (Te he contestado al mail, guapa)

    Maria, a mi me manda al pediatra porque dice que él no es pediatra, y que además no es objetivo. Pero de verdad que es muy útil tener al médico en casa! Qué pasó con la úlcera?

    Ay Juliete, ojalá! Si yo cogí los billetes convencida de que era una buena opción! A lo mejor es que de tanto oir que si estaba loca me lo he creido.

    Gracias por vuestro apoyo chicas!
    Un millón de besos!

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  5. Nihilismo infantil?? me ha encantado la expresión, me la quedo!!
    Que tengáis un buen viaje!!

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  6. Espero que tengais un buen viaje, y parrulin vaya dormidito.. que nervios¡
    Estoy deseando ver como fue la aventura¡¡ Es toda una aventura¡¡ Vas a tener la compañia de tu familia que te hara menos dura la falta de tu marido¡ Pasalo bien¡¡¡

    http://lascosasdemipitufo.blogspot.com/

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  7. Pues le pusieron un parche 2 días y con las cremas y las gotas se le curo perfectamente!!! Muchos besos

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  8. lamamadeunabruja, ya te tocará, ya, y lo entenderás! Ja, ja!

    Annie, ya he empezado a contarlo, al final sí fue dura la semana, he escrito el comienzo sólo.

    Maria, pues que bien que fuera tan rápido, no?

    Besos chicas!

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