Vaya lunes!

El fin de semana se me hizo muy largo y pude hacer una o ninguna de las cosas pendientes.

El sábado se levantó prontito el Parrulín, desayunamos y estuvimos bastante entretenidos porque pusimos el programa de música de la 2.

Después me acompañó al super. Este encanto de niño se apunta a todo ¿vienes conmigo al super? Si, si, al super, que bien! ¿Me ayudas a poner una lavadora? Si, si, levadora que bien! Y así con todo. Lo único es que tiene que elegir él el color del super. El amarillo queda enfrente de casa, es un hiperusera, el azul es el lidl y queda muy cerquita también, pero cuando toca el rojo que es el dia, echate a temblar! No está demasiado lejos pero si tengo que comprar una caja de leche me niego! Mientras escribo esto estoy pensando que debería coger el carro de la compra que tengo en casa, pero me dá una impresión de maruja terrible!!!

Por la tarde empezó a toser. Vaya! Pues nada, a empezar con la rutina de siempre. Organización lo primero: Yo lo baño y le doy cremita, tú le das el aerosol, yo le doy de cenar, tú lo duermes. Ventajas de tener un papá médico, que esas cosas le tocan a él. Y que te tomas las enfermedades como algo más natural, no te pones nervios@ y vas corriendo a urgencias (aunque sí fuimos cuando tuvo espasmos febriles; bueno, y cuando se hizo una brecha en la cabeza también, claro).

Ayer domingo fuimos al teatro. Que desastre! No me gustó nada! Parrulín estaba atento, no se perdió nada, le gustó, no sé si lo entendió, pero bueno. Contar la bella durmiente con trastos usados se resumía en que el rey era un tenedor, la reina una cuchara y la princesa otra cuchara más pequeña. Me decepcionó bastante la verdad. La prometida participación de los niños no la ví por ninguna parte, ninguno hizo nada, ni salieron al escenario ni nada. Las canciones… si en plural, porque eran dos, concretamente la misma, al principio y al final. Me decepcionó muchísimo.

Por la tarde tosía más. Aerosoles otra vez que durarán unos cuantos días y un jarabe nuevo que nos recomendó el otorrino para cuando se pusiera malito otra vez, actitiol o algo así, un antihistamínico, veremos cómo le va. Después de cenar comenzó la fiebre. Añadimos paracetamol. Y esta mañana cuando me levanté para ir a trabajar tenía bastante fiebre otra vez, otro chute de paracetamol y a ver cómo aguanta el día.

Lo peor es que hoy era el día que mi madre tenía una cita importante con el médico, esperada durante meses, y la iba a acompañar. Así que he tenido que convencerla para que no anulara la cita y se llevara al niño que me daba tiempo a llegar antes de su cita y a quedarme con el niño en la sala de espera. Me ha costado convencerla, la verdad. Todo solucionado excepto que no sé ni cuándo ni cómo voy a comer y que con este trajín le trastocamos la siesta al Parrulín y no sé qué tal le sentará, normalmente es un niño muy bueno, pero tiene sus ratos, como todos.

Me ha llamado para explicarme que no ha ido al cole porque está malito, pero que no le duele nada y tose menos. Le he dicho que le quiero mucho y me ha respondido “Ya lo sé mamá”. Me gusta que lo sepa, aunque no deja de sorprenderme su respuesta. Seré muy pesada? Bueno, pues que se aguante porque esto no lo voy a cambiar, ni quiero tampoco.

La buena noticia del lunes: MAS DE CIEN VISITAS! Wow! Gracias, me hace una ilusión inmensa! Gracias, gracias.

Mañana más!

Sean buen@s y felices!