domingo, 31 de marzo de 2013

Imaginación y realidad

Esta estupenda mujer que escribe, que es una descerebrada, una ilusa y un poco paticorta, por parte de padre, se había imaginado un viaje tranquilo, bucólico, familiar... Y cuando una se crea ciertas expectativas llega la realidad y ¡zas! te da una patada en toda la boca, y nada es como habías imaginado, sino más complicado, más caótico, más triste...

Estar sola con dos niños ha sido todo un caos, Parrulín rebelde a más no poder y Xoubiña demandante a más no poder.

Imaginaba a los dos en el viaje de ida durmiendo como santos y a mi misma también, la realidad es que no fue así, y el de vuelta de mañana ya veremos, cruzo los dedos, tanto que me van a salir agujetas, tanto que tengo ya dedos de abuela artrítica.

Imaginaba a los dos jugando en la inmensa alfombra del salón, la realidad es que la alfombra no para de soltar pelusas, Xoubiña de intentar comerlas, y yo de perseguirla temiendo que me cague toda una alfombra persa para decorar mi salón, con sus flecos y todo.

Imaginaba que mejoraría el gateo, ya levantaba el culillo y lo intentaba, la realidad es que me persigue por toda la casa, voy al baño y aparece, voy a vestirme y aparece, voy a cocinar y aparece, es omnipresente la tía!

Imaginaba que dormir los tres juntos era una buena idea, la realidad es que ellos duermen pero yo no mucho, uno que se mueve, otra que duerme encima de mi, uno que quiere leche, otra que quiere teta...

Imaginaba que iba a llover y que estaba preparada, la realidad es que fui el jueves al centro comercial para desfogar al chiquillo y aún no se ha secado mi abrigo, lo pongo a secar, me lo pongo mojado, se moja más, lo pongo a secar, me lo pongo mojado, se moja más, lo pongo a secar...

Imaginaba que lo peor había pasado, ya había estado en casa de mi madre sin ella, la realidad es que he dormido en su cama, lo que ya es mucho pedir, que Parrulín ha roto uno de sus platos, que me ha dado mucha pena, que está lleno de fotos de ella de pequeña, que ya no sé quienes son esas personas en blanco y negro y que ya no puedo preguntárselo.

Imaginaba que la gente ya lo sabría, la realidad es que me preguntan mucho por ella. Cómo está tu madre, que hace mucho que no la veo? Murió. Cuánto lo siento! Yo era muy amiga suya, la quería mucho! Pues mire que lo dudo, nunca llamó ni la conozco de nada.

Imaginaba que con lo poco que veo a mi santo y dos guardias en semana santa poco lo echaría de menos, la realidad es que espero sus llamadas como agua de mayo, que le añoro, que quiero dormir abrazada y no aplastada y que necesito sus besos, sus caricias y su consuelo más de lo que creía.

Imaginaba un corazón tranquilo y un reposo del guerrero, la realidad es un corazón triste y reposo ninguno.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.

miércoles, 27 de marzo de 2013

Descerebrada

Quien es la descerebrada que se mete en un autobús a Galicia con dos niños pequeños, uno de cuatro años y otra a punto de cumplir los siete meses. Pues servidora. Soy una descerebrada, lo sé.

Mi santo tiene guardia el jueves y el domingo. A tomar por culo la semana santa! No, yo me voy sí o sí. Sí o sí pero cogiendo tarde los billetes, para variar, y sólo me quedaba la opción de irme en autobús.

Qué será mejor, o más bien qué será menos malo, viajar con ellos de día, qué coñazo, o de noche, qué follón. Pues póngame cuarto y mitad por favor, la ida de noche y la vuelta de día. La ida la noche del martes para poder hacer compra allí el miércoles y la vuelta el lunes llegando a buena hora, que el martes hay cole.

Me voy a arrepentir. Aún recuerdo el viaje del año pasado, con Parrulín y una buena barriga, fue un horror. Y ahora voy y me meto sin barriga pero con bebé. Soy una descerebrada, lo sé.

A lo hecho, pecho. Ayer tenía el acto de conciliación con la empresa, que no quiso conciliar, claro, y puse al salir la demanda lo que me llevó  toda la mañana, tenía la tarde entera para hacer la maleta, no salía el autobús hasta las 12. Peeero me llamó MdB. Que si quedamos. Guay, si. La maleta a medias. Soy una descerebrada, lo sé.

Me piro a la fnac de Callao a una cosa de niños que al final resultó ser agotadora, para las madres. Nos vamos a mojar el gaznate que estoy harta de tanta cultura. Un par de copas, un par de cojines para el viaje y un par de paraguas con arco iris y nubecitas y me voy corriendo a casa a terminar la maleta.

Llega mi santo, cenamos, maleta lista y nos lleva a la estación. Llevo el niño, la niña, el carrito, la maleta, la bolsa de la niña, una bolsa con comida para el viaje y mi bolso. Soy una descerebrada, lo sé.

Parrulín se duerme en el taxi camino de la estación. No, ahora no, ahora no! Pero sí. Llega excitado perdido al autobús. Y yo, que aún no he pensado cómo voy a hacerlo. La niña paga billete, y tiene asiento, pero somos tres, uno de nosotros tiene que ir al otro lado del pasillo.

Parrulín, nervioso por la experiencia, quiere bajar el asiento aún antes de arrancar, le tranquilizo, le convenzo, arranca, se lo bajo, toma leche y se duerme. Uno menos! Esto está chupado! Ya sólo me queda una! Quién dijo que esto sería difícil? Mujer de poca fe, además de descerebrada.

Xoubiña también ha cenado antes de subir al autobús, sólo le queda un poco de teta y listo. Ilusa! Descerebrada!

Para empezar se caga y yo ahí, haciendo malabares para cambiarla en el asiento, yo de pie y el autobús en marcha. Para seguir le da el hipo, yo le doy teta para que se le quite, que suele funcionar, pero esta vez no. Está mucho más interesada en lo que pasa a su alrededor y en tirarle del pelo a su hermano dormido que en comer.

Hora y pico más tarde se ha dormido. Yuju! Como paga billete y tiene asiento la dejo en el cuco, atada, y al otro lado del pasillo. Hala, mujer todoterreno, a dormir toda la noche! Ilusa! Descerebrada!

Xoubiña se despierta al cabo de una hora, se queda en mis brazos media hora, la pongo en el cuco, se despierta al cabo de una hora, se queda en mis brazos media hora... Así toda la noche.

A las seis de la mañana se despierta Parrulín, pues bastante bien se ha portado. Tiene sed, tiene hambre y le duele la tripa. Oh, oh, que me lo veo venir. Un chico cercano y despierto, me coges el bebé que creo que va a vomitar el mayor? La coge. El otro vomita, yo haciendo fiestas, qué bien Parrulín, el niño que me mira raro, ¿bien por qué? Porque ahora te vas a encontrar mucho mejor.

Cambia al niño de sitio, mi bolso, la bolsa de la niña, la bolsa de la comida, limpia el asiento, coge a la bebé... Hemos llegado. Eureka! Creo que no se dice eso al llegar, pero yo si, y no beso el suelo por no agacharme.

Coge al niño, a la niña, el cuco, mi bolso, la bolsa de... Eh! Espere, espere no arranque todavía! La bolsa de la niña, la bolsa de la comida. Eh! Espere, espere, que tengo que coger la maleta y las ruedas del carrito!

Ahora estoy en la estación de tren, para coger el que me llevará a mi pueblo, estoy agotada y vomitada, y falta hora y media para que venga! Soy una descerebrada, lo sé. Y aún me queda la vuelta!

Mamá descerebrada.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.

sábado, 23 de marzo de 2013

Otro cuento chino, por Papá de Parrulín


El carpintero Shih iba caminando al reino Ch´i. En el camino vio un gran árbol junto a un templete. Era tan grande que podía cobijar varios miles de bueyes bajo su copa. El perímetro de su tronco era enorme. Con él se podrían hacer decenas de barcas. Todo un pueblo cercano utilizaba su sombra para merendar los días de fiesta.
El carpintero ni siquiera lo miró, y pasó de largo sin detenerse. Su aprendiz, después de hartarse de mirarlo, fue a su maestro Shih y le dijo: desde que yo manejo el hacha y la azuela y ando con usted, nunca he visto un árbol tan bueno como éste. El maestro ni siquiera se ha dignado mirarlo, y ha pasado de largo. ¿por qué eso?.
El maestro Shih contestó: Déjalo, no me hables de él. Es mala madera. Si haces barcas con ella, se hunden. Si haces ataudes, se pudren rápidamente. Si haces puertas y ventanas, te estarán siempre destilando resina. Si haces columnas, la polilla las comerá y destruirá. No es de buena madera. Ese árbol no vale para nada.
Cuando el carpintero volvió a casa, el árbol se le apareció en sueños y le dijo: Hombrecillo inútil y condenado a morir en unos años; ¿cómo te atreves tú a juzgar que soy de mala madera? A los árboles nobles su propia valía les ha hecho dolorosa su vida. Son cortados y mueren antes de tiempo. Yo hace mucho que busco ser inútil para todo. He estado en peligro de morir, pero al final he logrado lo que pretendía. Esta es mi mayor utildad. Si hubiese sido útil, ¿cómo podría llevar mil años dando sombra a todo un pueblo y contibuyendo a hacerles felices? ¿Aprendereis alguna vez a respetar la naturaleza propia de todas las cosas, en vez de juzgarlas?

Adaptado del Libro de Chuang-Tzu.
 
 

Por Papá de Parrulín y Xoubiña.
 

miércoles, 20 de marzo de 2013

Perlitas de amor

Ay mi Parrulín, pero mira que es tierno el chiquillo, que me da mil abrazos a lo largo del día, que me besuquea esterita a todas horas, que me regala flores chuchurrías y se mosquea cuando desaparecen. "Mamá te quiero" Y yo a tí te adoro, mi niño. "Mamá te adoro" Ay, que te como a besos enterito! "Mamá te amo" Y yo a tí más! "No, yo más!" Y así, cual adolescentes hormonados, nos pasamos todos los días recordando lo mucho que nos queremos. Sólo nos falta la conversación teléfónica de Cuelga tú. No, cuelga tú primero. No tú. Que levante la mano la que no haya hecho subir las acciones de telefónica con este tipo de conversaciones, en otra época claro, la versión actual sería un montón de emoticonos del wachap llenos de corazones y cursiladas semejantes.

Todas las mañanas al despertarle, todavía medio dormido, todavía medio legañoso, le llevo en brazos al salón y lo primero que me dice cada día es cuánto me quiere. Esta ha sido la conversación de hoy "Mamá te quiero" Y yo a tí, cariño, es que no te puedo querer más de lo que te quiero! "Si puedes" Que no, que no puedo, que ya te quiero hasta el infinito! "Mira mamá, tengo aquí una caja imaginaria llena de amor. La ves?" Eh... si, la veo. "Pues está hecha de plástico, para que la puedas romper" Ah... bien. "La tiras al suelo, la rompes, y sale el amor para que me quieras más!" De acuerdo, me la das? "Claro, cómo no, es para tí, pero rómpela, eh?" De acuerdo. Cojo la caja imaginaria, la estrello contra el suelo, y me echo encima todo el amor imaginario que llevaba dentro. "A que ahora me quieres más?" Hombre, muchísimo más, ven aquí que te voy a estrujar un poquito! Pero qué babosos somos! Me encanta! No quiero ni pensar cuando llegue la etapa en la que no quieren dar besos y les da verguenza que su madre les abrace.

Se quería llevar un juguete escondido en el abrigo al cole, pero se supone que no se puede llevar juguetes al cole y además el juguete en cuestión que es un toro muy gracioso, ya se quedó olvidado por error en el súper, nos constó un buen disgusto y nos llevamos una buena alegría al encontrarlo el día siguiente. No cariño, no te lo puedes llevar. No dejan y además lo puedes perder. En el súper lo encontramos, te acuerdas? Pero si te lo llevas al cole lo puede encontrar otro niño y llevárselo. Y por un toro de plástico me encontré con esta curiosa confesión.

"Mi novia R ya no se lo puede llevar" Tu novia? "Si, una de ellas, R, que se ha ido a vivir a otro pais" Una de ellas? Pero cuántas tienes? "Tengo dos, R, e I, pero R era mejor novia" Ah si? Y por qué? Y para qué sirven las novias? "Pues porque me daba más besos y eso es lo que hacen las novias!" Eh... y dónde te daba los besos? Así, por curiosidad. "Pues en la cara, mamá, en la boca no porque no tengo edad para eso" Ah, muy bien, me tranquiliza."I también me da besos pero menos, R me saludaba todas las mañanas, me decía Hola novio, y me daba besos" Ah, pues qué pena que se haya ido, no? "Bueno, pero podemos seguir siendo novios igual!" A distancia? Mira que las relaciones a distancia son complicadas, incluso a los cuatro años. Cuándo la vas a volver a ver? "Pues nunca, mamá, pero como ya la ví una vez, fuimos novios y ya somos novios para siempre!" Pues ya lo estoy viendo, ya, dentro de unos años, cual adolescentes hormonados, con la típica conversación teléfónica de Cuelga tú. No, cuelga tú primero. No tú. En otra época, claro, la versión actual sería un montón de emoticonos del wachap llenos de corazones y cursiladas semejantes. O bien algo como esto:



Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.


martes, 19 de marzo de 2013

Un finde inolvidable

Este fin de semana hemos tenido un congreso de taradas, el número cuatro, creo. Y cada vez nos superamos, lo organizamos mejor, lo pasamos mejor y nos da más pena aún tener que despedirnos. Pasamos el fin de semana en una casa con patio y barbacoa, eramos cuatro taradas, tres maridos, siete niños, uno más en camino, un perro, carne y cervezas como vituallas y muchas ganas de pasarlo bien.

Llegar hasta allí a mediodía no fue tan complicado como pensaba Jeza, mujer de poca fe, no sé si poca fe en nosotras o poca fe en nuestra tecnología gps, y creía que no llegaríamos tan fácilmente, así que tuvimos que esperarla, maletas, comida y niños en la acera, hasta que apareció. Era ya la hora de comer, así que maridos a la barbacoa, niños a jugar, yo a descongelar la papilla de Xoubiña y el resto a comprar cosas de última hora. Coño! me he equivocado, esto no es papilla es caldo! MdB, Porfin! a la que comprais cervezas, comprad también potitos por favor! Oído cocina!

Tras una opípara y colesterolémica comida de barbacoa no hubo un sólo niño que quisiera dormir la siesta, así que pasaron la tarde jugando, nosotras charlando, y los maridos intimando que más quisieran unos cuñados llevarse igual de bien que estos tres, si hasta terminaron el finde creando su propio grupo de wachap, envidiosos ellos!

Cena de niños, reparto de habitaciones, acostamos a los niños con esfuerzo y cenamos nosotros. Una queimada para ahuyentar a las meigas y para recordar a los amigos que están fuera, unas copas aderezadas con risas y conversaciones de urracas, un buen repaso al mundo blogeril, un análisis de los pros y contras de ir de camping con una tienda huevo y un descubrimiento sobre mangueras extensibles que me hicieron hasta llorar de risa.

A la mañana siguiente un desayuno infantil con colacao, un aperitivo adulto a base de blody marys, y los hombres a base de cerveza, barbacoa y fórmula 1 nos prepararon la comida. Tras recoger, limpiar y cerrar la casa vino la despedida, y la segunda despedida porque Porfin tuvo que volver a recoger su bolsa de maquillaje, olvidada en el baño, y la tercera despedida cuando me acercaron con mi santo que estaba de guardia, y la cuarta despedida cuando fui a casa de MdB para recoger las ruedas del carrito que se habían quedado allí por problemas de espacio.

Los niños, un amor todos, la preciosa Vega con cara de despiste al ver su casa invadida por un montón de jenízaros, Gonzalo una copia de su padre con cara de pillo jugando con el balón, Alejandro y su paciencia infinita con los pequeños, Eduardo compartiendo con Parrulín su preciada consola, Mario llamándome tonta para que le diera una paliza de besos, y la pequeña Xoubiña, que no hay niña con ella de lo bien que se porta.

Parrulín cuenta que ha pasado dos días con sus amigos (ya no son mis amigas y sus hijos, son SUS amigos) en una casa... que tenía varios cuartos de baño!

Foto para el blog:

Gracias chicas, por todo, porque siempre estais a mi lado, porque siempre teneis una sonrisa, porque os quiero con el alma, porque estoy deseando tener el próximo congreso!

Mamá de Parrulín y de Xoubiña
Otro día más.
Sean buen@s y felices!



viernes, 15 de marzo de 2013

Un poco de filosofía, por Papá de Parrulín

Con todos ustedes... primicia mundial... señoras y señores, niños y niñas... os presento a... Papá de Parrulín! Tachán! Un gran aplauso para nuestro nuevo participante!

Papá de Parrulín va a colaborar con nosotros y esta es su primera entrada.
Un poco de filosofía, por Papá de Parrulín.
 
Chuang-tzu. Filósofo taoista chino. circa s. IV A.C.
Chuang-tzu pescaba en el río Pu.
El rey de Ch´u le envió dos mensajeros para decirle: Tengo la intención de nombrarle consejero de mi reino.
Chuang-tzu, con la caña en la mano, sin dirigirles la mirada, les contestó: He oído decir que el rey de Ch´u posee una tortuga mágica que murió hace ya tres mil años. Se dice que el rey la guarda en un cofre, envuelta en ricos paños. ¿Esa tortuga hubiera querido morir para que sus huesos fueran tan honrados o hubiera preferido seguir viviendo y chapoteando en la charca?
Los dos ministros del rey le respondieron: Hubiera preferido vivir y chapotear en la charca.
Chuang-tzu les dijo: Marchaos. Decid al rey que yo tambien seguiré chapoteando en la charca.
 


Aquí
 
En el mito chino la tortuga es un animal sagrado que sostenía el mundo en su espalda.
 
Papá de Parrulín y de Xoubiña
 

jueves, 14 de marzo de 2013

De bautizo

El sábado pasado bautizamos a la pequeña Xoubiña. Xoubiña, mi niña con nombre de reina, mi currusquita, mi pequerrechiña, mi amor, mi compañía, mi consuelo, el melocotón de su abuela.

Fue un bautizo bonito, íntimo y familiar. Fue un bautizo triste. Faltaba mi madre. Estaba en mi corazón, en mi recuerdo, en mi alma y en mi mente. Mamá, cómo te echo de menos, cada día que pasa te echo de menos un poquito más aún!

Esperaba el día con ilusión, el traje de cristianar de la familia de mi marido era antiguo, hecho a mano y espectacular, no tengo palabras para definirlo. Yo me había comprado un vestido nuevo, morado, me gusta mucho ese color ultimamente, era bonito, favorecedor, y con un estratégico botón para poder sacarme una teta en caso necesario. Que no es tan fácil encontrar un vestido con todas esas características! Y Parrulín estaba muy guapo también, con una camisa de rayas y una chaqueta azul de punto, elegante a la par que informal. Mi santo... guapísimo con chaqueta y corbata, no recuerdo la última vez que le ví de traje!

También estaba emocionada, a mí estas cosas me emocionan y me sacan la lágrima fácil, aunque la verdad es que es muy sencillo sacarme a mí una lágrima y ultimamente más. Soy una sentimental, qué le vamos a hacer!

Llevaba toda la semana contándole a Parrulín que ibamos a hacer una fiesta para el bautizo de su hermana, que iba a venir toda la familia, la mía y la de papá, y además las amigas de mi madre que no podían faltar en una ocasión como esta, que son parte de la familia. El día anterior le había contado que además de la fiesta de ese fin de semana el próximo tendríamos otra fiesta porque ibamos a quedar con mis amigas las taradas y todos los niños. El día del bautizo al despertarse me dijo "Oye mamá, y si quedamos hoy con tus amigas y el bautizo ya si eso lo hacemos la semana que viene?" Se ve que eso le apetecía más.

Vestir al niño fue complicado, no colaboraba mucho, colaboraba más con Dora la exploradora, la verdad. Vestir a la niña tampoco fue fácil, tampoco colaboraba, y no por Dora, sino porque entre el body, la enagua, el faldón, el gorrito, la chaqueta, y una niña lagartija que no para de moverse yo me pongo nerviosa. Vestirme a mí... tres minutos de reloj, raya en el ojo, y a correr! Mi santo se vistió solo, jeje. Me hubiera gustado haber tenido más tiempo para arreglarme, pero me pone muy nerviosa llegar tarde. En este caso no hubiera empezado el bautizo sin la niña, está claro, pero me pone muy nerviosa.

El bautizo fue en la misma iglesia en la que nos casamos, lo que me llenó de recuerdos de aquel día, con Parrulín pequeñito corriendo por el pasillo delante de mí, de la novia, gritando de emoción al ver a su padre en el altar esperándome al lado de su yaya, cayéndose en mitad del pasillo y levantándose como un rayo para seguir corriendo a abrazar a su padre.

La ceremonia del bautizo fue sencilla, muy íntima, con un cura amigo de mis suegros que es un encanto, con Parrulín y mi sobrino dando vueltas libremente por el altar. Cuando el cura pidió quien quería leer allá fue Parrulín todo dispuesto! "Le-c-tu-ra de..." Cariño, mejor que lo lea tu prima mayor, que aún te falta un poco.

Xoubiña no lloró al echarle el agua, de hecho quería meterse de cabeza en la pila, se conformó con meter las manos solamente. Estaba preciosa y sonriente con todo el mundo.

Yo empecé llorando de emoción, pero cuando el cura me preguntó dónde estaban mis padres y le dije que fallecidos los dos, terminé llorando de pena. No tengo una foto mía decente del bautizo de mi niña, salgo llorando en prácticamente todas.

Ha sido un día muy dificil para mí, muy sentimental, muy bonito pero muy triste. Seguro que mi madre estaba allí conmigo, con su nieto del alma y con su melocotón, pero eso no me llega. La echo mucho de menos, y cada día un poco más. Cada día hay algo más que me gustaría haberle contado, algo más que me gustaría haber compartido con ella, algún consejo más que me gustaría haberle pedido, algún abrazo más que me gustaría haberle dado, algún beso más, alguna mirada más, algún te quiero más.

Aún no hay día que no llore por ella...

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sena buen@s y felices.

PD Para que veais lo guapos que estábamos, había hecho a mano los recordatorios, con mucho cariño. Son los mismos dibujos que hice para las invitaciones de boda, pero sin traje de novia, y cambiando el ramo de novia por el nuevo bebé.


martes, 12 de marzo de 2013

Comiendo

Cada vez que le toca comer a Xoubiña, que hay que ver la de veces que come un bebé a lo largo del día, la pongo en la trona, le pongo el babero, cojo el platito, la cucharita y un amplio rollo de servilletas para ir limpiando sus manos o su cara o lo que le caiga o lo que me caiga a mi. A veces soy más rápida que ella, pero pocas veces la verdad. Cada vez que come queda todo inundado de papilla y salvo la niña y la trona, que no me caben en la lavadora, va todo directo al cubo de la ropa sucia.

Me doy cuenta que este procedimiento está plagado de errores y voy a analizarlos y a comentar los errores que nos hemos encontrado en cada uno de ellos.

La trona:Tenemos la trona heredada de Parrulín, con ella heredamos también unas pegatinas de peces en la mesita de la trona. Hay que ver lo buenas que salieron esas pegatinas, oye, que ni con agua caliente salen, después de cuatro años. Hay que ver lo que le gustaban a Parrulín los peces! De hecho su primera palabra después de papá y mamá fue Pez. Y su primera palabra escrita también. Mola, así entretendrá a Xoubiña mientras come.

Error! No sé si es que no le gustan los peces o si es que le gustan demasiado, porque se pasa toda la comida intentando arrancar las pegatinas, tal vez para comérselas, o tal vez para tirármelas a mí a la cabeza. Quien sabe! Se cabrea y se frustra por no poder arrancarlas, protesta y resopla la papilla. Y luego esparce generosamente los restos por la trona, por mi ropa, por mi cara, por mi pelo y por su ropa, por su cara... Por su pelo no, porque no tiene.

Solución: Ninguna, tal y como terminamos de manchados ni loca la saco de la trona!

El recoge babero: He comprado un recoge babero, parecía estupendo, es un babero de plástico con un pequeño bolsillo donde cae todo lo que no cae en la boca del bebé. En apariencia un buen invento, aunque no tanto como las toallitas, claro. Teníamos muchos baberos de Parrulín,  pero como iban todos a la lavadora pensé que eso que me ahorraba.

Error! Ahora mete la mano en el recogebabero, le encanta coger los que cae de la papilla y se embadurna bien a gusto la mano en el bolsillo que tiene. Y luego esparce generosamente los restos por el recogebabero, por la trona, por mi ropa, por mi cara, por mi pelo y por su ropa, por su cara... Por su pelo no, porque no tiene.

Solución: Creo que hay baberos de usar y tirar, tendré que mirarlo.

El plato o cuenco infantil: Tenemos variedad de platitos o cuencos infantiles, todos heredados de Parrulín. Tenemos de Micky, de Pocoyo, de una rana verde, de un muñequito bebé blanco, de un muñequito bebé negro porque no somos racistas... Vamos, todo un surtido completo de variedades de dibujos y colores. Hasta tenemos uno de Vicky el Vikingo! Pero ese es mío y no se lo dejo, jeje. Alguno incluso incorpora una base de silicona anti-vuelco. Anti-vuelco, los cojones! Claramente fue un regalo, no hay quien se crea que puedan inventar un plato infantil anti-vuelco. Son bonitos y atractivos. Suena bien, eh?

Error! Si el plato tiene un dibujito en el borde, la niña quiere cogerlo y se mancha los dedos, si el plato tiene un dibujito en el fondo, la niña quiere cogerlo y se mancha toda la mano y hasta el codo, si me apuras. Y luego esparce generosamente los restos por el plato, por el recogebabero, por la trona, por mi ropa, por mi cara, por mi pelo y por su ropa, por su cara... Por su pelo no, porque no tiene.

Solución: Plato blanco de toda la vida, o en su defecto, cuenco de muñequito bebé blanco o negro girado para que no vea el muñequito.

La cuchara infantil: Tenemos variedad de cucharas infantiles, casi todas heredadas de Parrulín pero algunas también que son regalos recientes. Tenemos de Micky, de Pocoyo, de Winnie the Pooh, de Tambor el de Bambi, de silicona en azul, de plástico en amarillo, de ikea en verde... Vamos, todo un surtido completo de variedades de dibujos y colores. La mayoría tienen un dibujo atractivo, buen tamaño, ergonomía, material adecuado... Suena bien, eh?

Error! Las cucharitas infantiles no deben ser atractivas, eso sólo provoca que el bebé en cuestión, o el mío en particular, no pare de intentar cogerla y meter la mano en la cuchara llena de papilla. Y luego esparce generosamente los restos por todas partes, por el plato, por el recogebabero, por la trona, por mi ropa, por mi cara, por mi pelo y por su ropa, por su cara... Por su pelo no, porque no tiene.

Solución: Cuchara normal, de las de toda la familia, a ser posible de postre.

Casi todos estos inventos tienen solución. Pero... y cuándo mete sus dedos en la boca, llena de papilla, y luego esparce generosamente los restos por todas partes, por el plato, por el recogebabero, por la trona, por mi ropa, por mi cara, por mi pelo y por su ropa, por su cara... Por su pelo no, porque no tiene.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.
 

jueves, 7 de marzo de 2013

Problemas con la lactancia


Después de cuatro meses de lactancia materna exclusiva esta estupenda mujer estaba más que satisfecha, creía yo que esto iba viento en popa a toda vela, que pasados los primeros días de dificultades, dolores, grietas, etc, ya no habría problemas y seguiría con ella todo el tiempo que quisiera. Ilusa de mí...

El día que se murió mi madre hubo algunas personas en el tanatorio que me comentaron que iba a perder la leche por la pena y el dolor. Para ayudarme y apoyarme en ese difícil momento, supongo. Tanto como si me tiraran piedras a la cabeza. Xoubiña mamaba más que de costumbre en esos días, mucho más a menudo. Ves? Es porque estás perdiendo la leche y no le alimenta ya. Qué maja la gente, qué bien se le da tirar piedras, no?

Aunque no lo creía posible, en esos momentos de bajón llamé a la asesora de lactancia del grupo al que iba. Ella me explicó que podía disminuir un poco la producción de leche, pero que si seguía a demanda no habría problema, que la niña compartía mi pena y mi dolor y que quería estar conmigo, tenerme cerca, como yo a ella.

Xoubiña había probado una crema de verduras y le había encantado. Había probado también el jamón, con gran éxito. Y casi cualquier cosa que te viera comiendo le llamaba la atención y te pedía. Decidimos que con el interés tan grande que mostraba quizá era el momento de iniciar la alimentación complementaria. Compramos unas galletitas sin gluten para que fuera probando los cereales, de vez en cuando le dábamos una, y le gustaron mucho. Compramos también una redecilla antiahogo y le dimos a probar también la mandarina, que le gustó muchísimo también. Pero seguía con leche materna a demanda.

Me incorporé al trabajo e incorporé el sacaleches a mi vida, pero por mucho que me sacara no conseguía leche suficiente para alimentarla durante mi ausencia, así que comenzó a tomar leche de fórmula esporádicamente. Y cumplió cinco meses.

Un día comencé a tener pinchazos en los pezones, como si me clavaran un alfiler. Cariño, creo que tengo una cándida. Una que ha leído mucho de lactancia, aunque no haya tenido experiencia en esto, pero las cándidas y yo somos buenas amigas. Se me fue pasando sólo.

Unos días después, cuando ya no trabajaba y había vuelto a estar con la niña a tiempo completo, me empezó a doler, ya no como pinchazos, sino como dolor de verdad. Se lo dije a mi médico de cabecera, que casualmente es mi santo marido y esposo. Tienes un hongo, me dijo. Se te pasará con una crema antifúngica. Vaya por Dios! Vete a un dermatólogo de todas formas. Fui a ver a un dermatólogo. Es el roce, me dijo. El roce? Pero si lleva rozando cinco meses y nunca me ha pasado nada! Se te pasará con el purelán o similar. Aprovechando la vacunación de la niña se lo dije a la pediatra. Tienes una mastitis, me dijo. Se te pasará... no sé, pide cita con la matrona. Vaya por Dios!

Tres diagnósticos diferentes. Mola, no? Voy a volver a llamar a la asesora de lactancia a ver si me saca de dudas. Si fuera un hongo probablemente se te quitaría con una crema, si fuera mastitis probablemente se te quitaría con un probiótico y el roce no puede ser. Empecé con el probiótico porque daño no me puede hacer.

Estoy harta, me duele mucho, estoy perdiendo la lactancia porque me duele tanto que prefiero cantarle una canción antes que ponérmela a la teta. Porque cuando me duele demasiado y tiene demasiada hambre le doy un biberón de leche de fórmula. Porque cuanto menos le doy, menos tengo, está claro. Porque cuando le doy me duele, cuando no le doy me duele también. Porque con el frío me duele, porque con el roce de una camiseta me duele. Porque no doy a basto con el paracetamol.

Xoubiña come fenomenal, la alimentación complementaria ha sido todo un éxito, le encanta la papilla de cereales, le encanta la papilla de verduras, ya hemos incorporado el pollo también, le encanta la papilla de frutas... Cualquier cosa que le des la prueba con entusiasmo. Pero yo querría seguir con la lactancia también!

La semana pasada fui a ver a una enfermera de lactancia que me confirmó que era un hongo porque también lo tenía Xoubiña en la boquita. Se llama muguet. Así que tanto ella como yo comenzamos a usar una crema antifúngica, le tengo que poner la cremita en la boca varias veces al día. Sigo con el probiótico porque daño no me puede hacer.

Llevo un mes de dolores, hinchazones, grietas y comeduras de tarro que no se lo deseo a nadie. Espero que se me vaya pasando y reafirmarme en mi deseo de seguir con la lactancia o la perderé.

Y con este post de desahogo, lo dejo, que le voy a dar teta a la nena.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.

PD: Esto es una cándida en el pezón y en la boca de un bebé. No son los míos, imágenes vistas aquí y aquí. Xoubiña no tiene tanto, el mío está un poco peor que este.


 
 
 
 
 
 
 
 

miércoles, 6 de marzo de 2013

Perlitas, novedades y actualización del sorteo

Vamos a empezar con unas perlitas que tenía pendientes del rey de la casa, mi Parrulín, que tanto me hace reir con sus ocurrencias. Este niño, que no puede ser más lindo, ni más cariñoso, ni más divertido!

"Mamá, te quiero 2.000 vidas!" Ay mi amor, qué cosa más bonita! Muchas gracias! Hacía mucho tiempo que nadie me decía algo tan bonito como eso. Yo también te quiero. Tras un etcétera de frases típicas de mamá babeante, un millón de besos y de abrazos después, me dice "Tú sabes lo que es una vida?" Eh... claro, desde que naces hasta que te mueres, no? "No mamá, es el tiempo que tardo en perder una partida del juego ese del tiburón de la tablet" Ah, vaya, pues entonces no es tanto como yo creía, jajajajajajaja!

"Mamá, tengo vaginas!" Anda! Y cuántas tienes? Ojo, que lo primero que me sorprende no es la existencia, sino la pluralidad, porque yo tengo, aunque sólo una, con los tiempos que corren no me he podido permitir más de una. "Pues no sé, vaginas, mamá, vaginas" Ah... Vale, vamos a indagar qué es lo que sabe sobre esto, que el curso de orientación sexual lo llevo últimamente poco actualizado con Parrulín. Y qué es una vagina? "Pues eso que me ha contado papá!" Ah... A ver si mi santo ha avanzado en el curso de orientación sexual y no ha comunicado la actualización. Oye, y dónde tienes tú las vaginas esas? "En la garganta, me las vió ayer con un palito y una linterna" Ah, coño, anginas! Anginas, cariño, anginas!

Y es que ha estado un poco malito el pobre, hemos pasado unos días en casa cuidando de las vaginas esas, y volviendome un poco loca, ya de paso. Cuando por fin volvimos al cole estoy cerrando la puerta de casa y le veo un poco serio, pensé que no quería ir al cole o algo así. Qué te pasa, cariño, que te veo un poco serio? "Estoy muy preocupado, mamá" Vaya! Y por qué estás preocupado? "Pues es que me hago mayor, ya tengo cuatro años y ocho meses y dentro de poco ya tendré que ser padre!" Bueno, cariño, aún falta para eso, no te preocupes. "No, si lo que me preocupa no es ser padre, no, lo que me preocupa es que no sé con quién tener hijos" Ah... eso sí es más complicado! "Porque tendré que recorrer todo Madrid en busca de una chica que me guste para ser la mamá de mis hijos" Eh... Y ahora qué le digo? Que le pago el bonometro? Jajajajaja!

Espero que os hayan divertido las perlitas de Parrulín! Y ahora... las novedades de la tienda. Mamadeparrulin Shop se actualiza! Habéis visto los bodys nuevos?
 
 
 

 
 
Os gustan? Tenemos cualquier talla, manga larga o manga corta, corred que se terminan! Que me los quitan de las manos!
 
La verdad que no podía estar más contenta del éxito que está teniendo Mamadeparrulin Shop y la cantidad de pedidos que estoy recibiendo. Muchas gracias a tod@s vosotr@s.
 
Respecto al sorteo, que se me olvidó ponerlo en la entrada original, se celebrará el próximo lunes, así que aún tenéis tiempo para apuntaros.
 
Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.