Me complace comunicar que acabo de romper aguas. Seguiremos informando.
miércoles, 29 de agosto de 2012
domingo, 12 de agosto de 2012
Misión imposible y De aquí a la eternidad
Tengo dudas sobre el título del post, en cuanto a la primera parte no sé si llamarlo Misión Imposible, Desperado, tal vez Aguas Turbulentas o algo similar, la segunda parte se llamará De aquí a la eternidad. Si no estuviera hoy tan cinéfila y/o fuera menos original la primera parte se llamaría Operación Pañal y la segunda 37 semanas. Hace mucho tiempo que le vengo diciendo a Parrulín que si tiene ganas de hacer pis de noche que me avise. Visto el nulo éxito y la inminente llegada de más pañales, pero de otro tamaño, decidí quitarle el pañal de noche. Cuando le quitamos el de día no avisaba, ni se quería sentar en el baño, ni con ni sin adaptador, tampoco en el orinal, y sin embargo fue todo un éxito y no tuvo pérdidas ni escapes ni nada. Así que me las prometía yo muy felices con la retirada del pañal por la noche también. Debía de ser ahora, antes de la llegada de Xoubiña, luego sería peor. Empecé poniendo un despertador cada tres horas para levantarlo y llevarlo al baño. Fue un éxito, claro que el mérito no era suyo, pero le hacía mil fiestas por levantarse seco y le compraba además alguna chuche para motivarlo aún más. Al cabo de unos días, entre el despertador para él y levantarme yo varias veces también para lo mismo, no podía con mi cuerpo. Decidí que sólo lo llevaría cuando me levantara yo. A veces triunfaba y a veces no. Tres semanas después no tenemos ningún avance, no me ha pedido ir al baño jamás. No se ha despertado por estar mojado tampoco. Si se hace pis sigue durmiendo como si nada. Estoy un poco desesperada ya con el tema. Ya no sé qué hacer. Lo único que sé es que no puedo volver atrás. No puedo rendirme, sólo sobrevivir. Y la segunda parte del post, la de De aquí a la eternidad, estoy ya de 37 semanas, gracias a Dios que estoy ya de baja, porque no puedo con mi vida, entre el calor, la barriga, las malas noches... Dice una buena amiga que el embarazo son 8 meses y una eternidad. Pues ya estoy en la eternidad. Se me está haciendo larguísimo. Ya me he hecho la última ecografía la semana pasada, Xoubiña pesa ya 3kg, según la chica de las ecos ahora engordan unos 200gr por semana, lo que significa que si llego a la FPP rondará los 4kg, como Parrulín. Ya me he hecho también el electro para la anestesia, sin problemas. Y esta misma mañana he ido a monitores por primera vez, aunque me los tengo que hacer en otra clínica y llevárselos mañana a mi gine, así que no entiendo lo que quieren decir. Ya me lo explicará. En fin, que sólo me queda un poco más de tiempo y un poco más de paciencia. Para muestra, cómo fue el sábado pasado. Sábado, día de descanso. Descanso? Empezamos el día llevando a Parrulín a la piscina, junto con mi hermana y sobrino. Comemos allí y nos vamos a eso de las 4. Casi llegando a casa Parrulín se duerme, caminando, pobre, de milagro que consigo llegar a casa de mi madre sin tener que llevarlo en brazos. Se duerme inmediatamente. Pasamos allí la tarde y nos quedamos a dormir porque mi santo estaba de guardia y por aprovechar que mi madre tiene aire acondicionado, y con la intención de descansar. Descanso? Por la noche Parrulín se hace pis dos veces, quiere leche otras dos, yo me levanto tres para ir al baño y otra más muy asustada por un fuerte olor a quemado que me lleva a recorrer la casa olfateando como un perro hasta descubrir que algún cenutrio ha decidido que quemar un contenedor en la calle es algo divertido. Descanso? Ja! Al próximo que me diga que descanse le escabecho! Seguiremos informando. Mamá de Parrulín y Xoubiña. Otro día más. Sean buen@s y felices.
martes, 7 de agosto de 2012
Que te vaya bonito
Adiós Chavela, adiós, que te vaya bonito. Adiós a esa vida y esa voz desgarrada. Adiós y gracias.
Gracias por tus canciones, por tu voz, por tantos ratos melancólicos buscados a propósito.
Tenía yo veintipocos años cuando te oí por primera vez. Te descubrí de la mano de El País, que sacaba una estupenda colección llamada Universo Latino. Te descubrí acompañada de Mercedes Sosa, de Víctor Jara, Chabuca Granda, Pablo Milanés... Mejor compañía imposible.
Descubrí que también le gustabas a mi futuro marido. Más de diez años oyendo tu música. La última vez, y de forma obsesiva, este verano. Encontré discos tuyos en Galicia, te estuve oyendo a todas horas, quizá por la pena, por presentimientos, por las hormonas o no sé por qué. Pero es la tuya una voz privilegiada, que emociona, que pone triste, melancólica, pero sin dolor. Un catalizador de emociones contenidas, un álbum de fotografías antiguas, un baúl lleno de recuerdos.
Hace muchos años que fui con mi madre al que parecía que iba a ser tu último concierto en Madrid. Recuerdo el teatro entero volcado ante tu arte. Tu voz que no llegaba, tu profesionalidad para ocultarlo, tus ponchos que tanto definían. Las excepcionales guitarras, el magnífico requinto, supiste siempre acompañarte de buenos músicos.
Cuántas cosas dejaste prendidas
Hasta dentro del fondo de mi alma
Cuántas luces dejaste encendidas
Yo no sé cómo voy a apagarlas
http://m.youtube.com/#/watch?desktop_uri=%2Fwatch%3Fv%3DwuEO77NZnP4&v=wuEO77NZnP4&gl=ES
Adiós y gracias Chavela.
Como no todas son tristes dejo también esta, que dedico a mi santo esposo, a mis hijos, a mi madre, a tanta gente que me quiere y me acompaña por la senda de la vida.
http://m.youtube.com/#/watch?desktop_uri=%2Fwatch%3Fv%3DZyEiVLYlbaE&v=ZyEiVLYlbaE&gl=ES
Y para la novia del año, mis mejores deseos y esta bonita canción.
http://m.youtube.com/#/watch?desktop_uri=%2Fwatch%3Fv%3DkjGbQ9RkBTs&v=kjGbQ9RkBTs&gl=ES
Mamá de Parrulín y Xoubiña
Otro día más.
Sean buen@s y felices.
jueves, 2 de agosto de 2012
En el coche de papá...
Pensábamos volver el día 30, pero por culpa del taller, de Murphy, de la alineación de los astros o de un mal de ojos difícil de resolver no pudimos hacerlo hasta el 31. Nota mental: hacer una queimada para combatirlo.
Finalmente nos vamos el 31. La madre y el hijo lo tienen todo preparado desde las 9 de la mañana. El padre está en modo "no, si me quedan sólo cuatro cosas" desde el día anterior. La intención (de la madre) es salir temprano. La intención (del padre) es desconocida. Entre cerrar las maletas, la casa y cargar el coche no conseguimos salir hasta la 1:30, con 650 km por delante. Parrulín se sube al coche llorando, "Voy a echar mucho de menos la casita" Yo también mi amor.
Nada más salir el niño se duerme, la madre y la niña van hechas un cuatro, incomodísimas en el asiento de atrás, el padre va oyendo música. 300 km, varios sándwiches y varios cd más tarde, hacemos la primera parada. El coche se cala al llegar al área de servicio. El padre dice "Uy, se me ha encendido una luz muy rara, voy a tomar un café mientras miro en las instrucciones del coche qué significa" Madre cabreada (y hecha un cuatro), padre resignado, niño acelerado de tanto coche. Unas carreras del niño, una coca cola de la madre y una lectura del libro de instrucciones del padre después, el padre se descojona. Qué pasa? Ya sé qué significa la luz. La madre contiene la respiración. Qué? Puerta del conductor abierta. Tócate los huevos!
Entra al bar una familia de ingleses que piden bocatas para todos. Parrulín se acerca. "Me dais un bocata que tenéis muchos?" Menos mal que no le entienden, que si no, igual se lo daban. No sería la primera vez. No consigo convencerle de que se tome un sándwich de los que tenemos. El padre le compra un pedazo de bocata de chorizo tamaño hombre, el niño se lo zampa enterito.
Reanudamos la marcha. El niño ya no se duerme, el padre ya no puede oír música porque el niño no le deja, la madre y la niña siguen hechas un cuatro, incomodísimas en el asiento de atrás.
A 100 km de Madrid volvemos a parar. Al llegar al área de servicio el coche se cala, no se enciende ninguna luz y no arranca. Madre cabreada (y hecha un cuatro), padre resignado, niño acelerado de tanto coche. Otra coca cola después el coche sigue sin arrancar. Llamamos a una grúa. Cuando llega, sorprendentemente, el coche arranca sin problemas, por seguridad seguimos a la grúa hasta el taller más cercano. Madre cabreada (y hecha un cuatro), padre resignado, niño emocionado con la grúa.
El taller está a punto de cerrar. Nos dice que es un problema de presión de combustible, una válvula o un inyector, algo de poca importancia pero que requiere tiempo saber cual es y tenemos que dejar allí el coche. Hablamos madre y padre y decidimos arriesgarnos a llegar a Madrid porque el coche ha vuelto a arrancar. El amable tipo del taller nos da su tarjeta por si acaso.
Llegamos hasta el peaje, al ir a pagarlo el coche se cala. Ya no arranca. Madre cabreada (y hecha un cuatro), padre resignado, niño emocionado con la experiencia. Cierran nuestro carril del peaje, nos dejan salir del coche pero sin movernos de allí. Llamamos al tipo de antes para que venga. 20 minutos después nos llama el Race, que no se creen que necesitemos dos grúas en una hora y quieren comprobar nuestros datos. Comprueba lo que quieras. Vale, sois vosotros, ahora mandamos la grúa. Gracias majo.
Otros 20 minutos después nos llama la grúa, q empujemos el coche hasta pasar el peaje y nos recoge allí. Pagamos, cierran todas las líneas del peaje y empujamos el coche atravesando 4-5 carriles. Al rato llega la grúa. Parrulín, emocionado, y oportuno, quiere hacer caca. Aquí? "Es que me duele la tripa mamá" Si no hay más remedio... Por seguridad lo paso al otro lado de la protección, a cagar al campo, pero yo no puedo pasar, el padre está ocupado con el de la grúa y el niño no está acostumbrado a cagar en el campo. Se mancha todo. Cariño... Puedes venir por favor? Ejem... El padre pasa la protección y le limpia como buenamente puede. Nota mental: Enseñar al niño a cagar en el campo.
Mientras, el de la grúa ha llamado un taxi del seguro. Un buen rato más tarde llama el del taxi, que no puede recogernos allí y que nos lleve el de la grúa hasta el pueblo más cercano. Padre, madre e hijo suben a la cabina de la grúa, que nos lleva por unos tenebrosos caminos de montaña. Madre pensando ojalá no sea un psicópata el rumano de la grúa, porque no me gusta nada esto, padre conversando amigablemente con el posible psicópata, niño emocionadísimo de ir en una grúa. "Aunque me gustan más los dinosaurios"
Llegamos al pueblo y tras esperar un poco llega el taxista, cargamos todas las maletas en su coche, que por cierto es particular, es rumano también y muy amable, hasta tiene una silla de niño tamaño Parrulín, no habla muy bien el español, no me parece psicópata pero sólo porque vamos todo el rato por carretera, quedan 40 km para Madrid. Cariño, si no tienes coche, que se ha quedado en el pueblo, casi que me quedo a dormir con mi madre para que lleve mañana al niño a la guarde. De acuerdo.
Parrulín, vas bien? "Me duele la barriga" y veo que empieza a hacer una cosa rara con la boca. Para, para, que va a... Vaya, vomitó! Qué raro. Ya no hace falta que pares. Niño perdido. Muy bien Parrulín, ahora ya te vas a sentir mejor, ya verás. Nota mental: Debería dejar de jalearle cuando vomita, lo hago para que no se asuste, pero ya me vale.
Está bien el niño? Si, creo que si, manchado pero bien. Continuamos, taxista rumano elucubrando, será que se ha mareado, padre elucubrando, si nunca se había mareado, será el ajetreo de viaje que llevamos, madre apostillando, qué coño, es el bocadillo de chorizo, que no sabéis cómo huele aquí atrás.
Continuamos. Para, para, que va a... Vaya, vomitó otra vez! En diagonal! Madre perdida, manchada entera. Agg! Muy bien Parrulín, ahora ya te vas a sentir mejor, ya verás. Nota mental: Insistir en la nota mental anterior.
Aún vomita otras tres veces más. Cariño, este niño vomita a la vez por la nariz y por la boca, es impresionante! Pues como todo el mundo. Ah si? Madre y niño perdidos. Cariño, sólo me falta ponerme de parto! Ja, ja, ja! Ataque de risa imparable de los dos. El taxista pregunta si me lleva al hospital! No, no, era una broma, gracias. Aparca el taxi frente a casa de mi madre, el padre y yo no podemos parar de reírnos sin motivo alguno.
Parrulín va preocupado porque está muy manchado. "No quiero que la abuela me vea así de sucio, que me va a reñir!" Pero cielo, si la abuela no te riñe nunca, y además ha sido porque estás malito, no te preocupes.
Llegamos a casa de la abuela que se lanza a abrazarlo. Ni lo toques! Vamos al baño mi amor. Niño limpio y abrazado. No quiere ni debe cenar, así que se acuesta agotado. Son las 12 de la noche.
Vaya viajecito! En el coche de papá...
Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.