miércoles, 26 de noviembre de 2014

Esta niña es una cochina! A su edad, tomando teta!




Esta niña es una cochina! A su edad, tomando teta! 

Cochina? Mi hija? En todo caso cochina serás tú! O tu madre! Pero me callé y me mordí la lengua porque no va con mi estilo meterme en discusiones y menos aún en un tanatorio. No iba con mala intención, lo sé, pero desde luego no pudo ser más desafortunada, ni más repetitiva la señora. Era… como una broma para ella y lo repitió en varias ocasiones, se ve que le debía de parecer muy gracioso el comentario.

Llegamos allí agotados después de un larguísimo viaje en metro y una cuesta arriba horrorosa hasta llegar al tanatorio, yo no podía con mi alma y mis hijos estaban también agotados y acalorados, les ofrecí agua a los dos nada más llegar, y en petit comité, sentada con mi amiga y su hermana, la pequeña me pidió teta. Intenté que cambiara de opinión y dejarlo para casa pero insistía, estaba en un lugar más o menos íntimo y se la di.

Esta mujer es vecina del barrio, ella estaba algo apartada y sentada con otra señora detrás de mí. Desde mi espalda le dice a mi hija que es una cochina! Yo la verdad que pensé que no había oído bien, pero se lo volvió a repetir y yo opté por hacer como que no me había enterado. Era como una broma para que la niña se riera, pero no se reía, y yo menos todavía. A esa edad y tomando teta, si eso ya es vicio, que ya no sirve para nada. Le comenta a la señora que tiene a su lado y la otra le da la razón. Y yo, respirando para bajar revoluciones y no montar el numerito.

Es la primera vez que me ocurre algo tan desagradable, Xoubiña cada vez es más mayor y procuro no darle en la calle, pero si me pide insistentemente tampoco se la voy  a negar. Como tampoco le negaría un beso ni un abrazo a ninguno de mis seres queridos estuviera donde estuviera.

Y yo, que he sido educada en la contención, en el ver, oír y callar que decía mi madre, en no montar el numerito en ningún lugar (y menos en un tanatorio) pues eso hice, me callé. Y me pesa, y me indigna tanto que haya sucedido como que me haya callado. No será la última vez que vea a esta señora (y digo señora por decir algo) y no sé si la próxima vez le diré cuatro cosas, o le tiraré de los pelos, o volveré a morderme la lengua y a callarme, aunque me pese.

Os ha pasado algo así? Os habéis mordido la lengua o le habéis mordido la yugular?

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.

martes, 25 de noviembre de 2014

Vuela libre



Mañana de entierro y tarde de cabalgata, esta frase la he utilizado a menudo porque es lo que sucedió con mi madre, pero es también un resumen de lo absurda e irónica que es la vida en ocasiones y lo inoportuna que es la muerte siempre.

Mientras yo pensaba en mi calendario de Adviento y en mis casitas, un amigo de la familia se moría. Un amigo al que teníamos mucho cariño, el marido de una amiga muy querida. Se marchó despacito, sin prisa y sin ruido, tranquilo y en paz. Nos dejó su memoria, su recuerdo y su cariño.

Estaba a punto de ser abuelo, y yo recuerdo que cuando nacieron mis hijos y él los cogió en brazos por primera vez lloró de emoción en las dos ocasiones, creo que ha sido el único amigo que ha llorado al conocer a mis hijos. Era un hombre inteligente, apasionado de la historia, y con gran sentido del humor. Era también un sentimental.

Parrulín sabía que estaba ya muy enfermo, al recogerle del cole le dije que se sentara en un banco de la calle “¿Vas a decirme que se ha muerto A?” Pues… sí cariño. “¿Podemos ir a despedirnos de él?” Pues… sí cariño, vamos ahora un segundito al tanatorio, pero poquito rato, yo también quiero despedirme. Nunca me ha parecido apropiado que haya niños en un tanatorio, pero yo quería despedirme, mi hijo también y tampoco tenía con quién dejarlos. 

Me apena y enorgullece que el niño lo acepte con tanta naturalidad. Me apena porque con seis años ha tenido que vivir la muerte muy de cerca, la primera la de su abuela, tenía sólo cuatro años, la de mi primo, y ahora la de este amigo, personas de su entorno a las que quería y con las que convivía, y es mucho. Yo creo que viví la muerte de cerca por primera vez a los once años, era la de mi abuelo, y la segunda no llegó hasta los veintiuno, ya era mayor cuando murió mi padre.

Me enorgullece que a su edad haya sido capaz de comprender que la muerte es un proceso natural, sin dramas ni traumas y sin el sentimiento de angustia y malestar que nos atenaza a los mayores. Cuantos menos traumas tenga más libre será en la vida y más ligera será su mochila. Creo que la clave ha sido responder a sus preguntas con naturalidad y sinceridad, sin mitos ni invenciones, sin falsas promesas, sin angustia y sin dramatizar.

Algunas veces, muy pocas, me dice que echa de menos a la abuela, pero no quiere hablar de ello porque no quiere ponerse triste. Yo le digo que podemos acordarnos de las cosas divertidas que hacíamos con ella, de cómo le gustaba jugar con él a las maderitas y a la granja, que no me dejaba que le riñera nunca hiciera lo que hiciera, que le quería incluso más que a mí…

El empeño y el enorme esfuerzo que supuso para mí que Parrulín viviera la muerte de su abuela con naturalidad ha dado sus frutos. Y es una de las cosas más difíciles que he tenido que hacer como madre.

Ayer fuimos a despedir a un amigo, con calma y serenidad, y le pedimos que le diera muchos besos a la abuela. Querido amigo, descansa en paz. Vuela alto. Vuela libre.

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.

lunes, 24 de noviembre de 2014

Calendario de adviento de manualidades y actividades (IV-fin)



Ya llegamos al final de las actividades! Últimas casitas disponibles! Por cierto, habéis terminado de montarlas? Queda justo una semana! Delia sí, es mi heroína, una campeona! Último empujón de manualidades y actividades para rellenarlas, aquí está.

Día 21. Hacemos bolas de navidad con cuerdas y globos
Esta es una de las cosas que siempre he querido hacer y que estoy aprovechando este calendario para hacerlas, ya lo dijo Chitin y tenía razón, es un calendario de adviento con MIS asuntos pendientes, pero cualquier excusa es buena. Tan fácil como inflar unos globos, rodearlos bien con una cuerda mojada en cola y explotarlos cuando estén secos. He visto muchas aplicaciones para esto como lámparas y otras cosas, yo lo voy a hacer de Navidad. Toda la explicación en Inventado baldosas amarillas, y puede quedar así:


Día 22. Adornos para el árbol con plastilina
A Parrulín le encanta la plastilina, tenemos un montón de bolas de esas de color gris-caca-indefinido de mezclar los colores, a veces se empeña en meter alguna figurita en el congelador para que se endurezca, pero cuando se calienta vuelve a quedarse blandita. Se va a volver loco cuando le diga que podemos comprar plastilinas de colores para hacer los adornos y que la podemos endurecer con… laca de pelo! No encuentro dónde lo vi, aunque juro que lo vi, os dejo con Manualidades Infantiles que lo hacen con barniz, aunque yo probaré con la laca primero.


Día 23. Hacemos adornos comestibles
Sucedió que el sábado fuimos a comprar patatas fritas a una tienda de frutos secos y había unas bolas similares a los chetos pero blancas, unas con las que también se podrían hacer guirnaldas para el árbol y unas patatas con agujeritos, lo mismo. Y si no, ¿qué tal una corona de Navidad? ¿De palomitas? El proceso en Sueños de Craft, ¿Y de caramelos? En Mil ideas tenemos un montón de ellas, comestibles todas. Aunque también me he vuelto loca con todos estos adornos que se pueden hacer con… macarrones! Visto en javies. Alguna haremos.




Día 24. Preparamos gorritos de Papá Noel para la cena
La idea de este día es hacer algo para llevar a la cena familiar, pero tiene que ser algo fácil, fácil. ¿Qué tal estos gorros de Papá Noel de Cuidado Infantil? ¿Y los arbolitos de Navidad de la misma página?




Con esto hemos terminado! Ya no hago más manualidades hasta… no sé… carnaval? Hasta Carnaval o hasta que me pidan, que cada día soy más adicta a estas cosas por lo que se ve. Imprimiré cada una de las fotos de estos post y anotaré por detrás la actividad que vamos a realizar. Cuando terminemos guardaremos el material no comestible para años sucesivos. He pensado que sería muy bonito ir viendo cómo crece su mano con adornos con la fecha en pasta de sal, la del día 3, además de tener recuerdos de lo que vaya sobreviviendo. No sé si me dará la vida para tantos planes pero estoy muy ilusionada con hacer tantas cosas especiales. Espero que perdure en su recuerdo el amor y la dedicación que le pone su madre.
 
Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.

viernes, 21 de noviembre de 2014

Calendario de adviento de manualidades y actividades (III)



Venga que ya queda menos! Ánimo! Unos días más y a ver si terminamos de montar todas las casitas y de aplicarle su relleno correspondiente. Cómo van esas casitas? Quién va ganando? Yo desde luego, voy perdiendo, me he liado haciéndole a Xoubiña un vestido de navidad y estoy como loca con ello. Sacaremos el tiempo necesario, a ver si lo consigo este finde, obviamente las casitas tienen que estar para el día 1, el vestido con que esté para ir a ver a los reyes me conformo.

Consejo de Delia, por si os pilla a tiempo, hacedle pestañas a los tejados para que sea más sencillo pegarlos después. Gracias Delia! Yo sigo con el relleno, a ver si os apetece hacer alguno de ellos.

Día 14. Hacemos muñecos de nieve con calcetines
Ay esto me ha encantado, para reutilizar todos los calcetines desparejados que hay en casa o para desparejar los que nos apetezcan porque queda chulo, chulo, chulo un muñeco Olaf. Lo he visto en facilísimo y ES facilísimo, jejeje.


Día 15. Elaboramos el regalo de Navidad para la profe
Parrulín quiere hacerle un regalo a su profe, hace mucho tiempo que tenía en mente hacer un cuadro con ceras derretidas y me parece el regalo perfecto para una profe. Puede quedar así de bonito y he visto todo el proceso en Estilo y deco.


Yo me conformo con algo básico, pero sólo hay que complicarse un poquitito de nada para hacer cosas tan originales como poner un paraguas o pegar unas flores. Visto aquí y aquí.




Día 16. Hacemos bolas de nieve con muñequitos
Este es un clásico de navidades, lo hicimos el año pasado con un robot, no salió demasiado bien porque Parrulín se empeñó en meter plastilina también y se empezó a derretir y manchar el agua muy pronto. El secreto consiste en dos cosas, la primera no poner plastilina y la segunda en echar un poco de glicerina al agua, si se coloca todo primero se puede ir añadiendo hasta que la velocidad de caída de la purpurina o del poliexpan sea la deseada, es un curioso experimento. Ya veremos qué deciden ponerles dentro, os dejo el ejemplo de Kireei



Día 17. Preparamos arbolitos de Navidad para los amigos del cole
A Parrulín le emociona llevar algo para comer al cole en días especiales, cocinar para 25 niños no entra en mis planes, pero sí podemos hacer algo tan sencillo como transformar un brownie comprado en preciosos arbolitos de Navidad con sólo unos lápices de decorar del Dr. Oetker, un palito de caramelo y algo de "decoro" que dice mi hijo. Lo he visto en las recetas de Entrechiquitines.


Lástima que el queso no le guste, porque también me he quedado loca con estos Papá Noel de la misma web, alucinantes.



Día 18. Vamos a ver a los Reyes Magos!!!!
Si de aquí al día 18 de diciembre sigo en la misma empresa iremos a ver a los Reyes, que se pasan por allí todos los años. Si de aquí al día 18 de diciembre estoy en el paro ya me buscaré un centro comercial con Reyes Magos para llevar a los chiquillos. Buscaba una imagen para ilustrar este día y me apetecía que fuera de Ferrandiz, para mi sorpresa he encontrado las figuritas de los Reyes Magos que tenía mi madre. Están a la venta en todocolección con el título Reyes Magos, Ferrandiz, cabezones, años 70. No sé si reír o llorar.


Día 19. Hacemos adornos con limpiapipas
Hay infinidad de ejemplos en la red, esto de los limpiapipas, que tengo que reconocer que no sabía lo que era, está en todo tipo de manualidades y no puede ser más sencillo. En Inventando baldosas amarillas rizan el rizo y los sumergen en borax para hacer como si estuviera nevado. Flipante, aunque creo que me quedaré en el nivel básico.


Día 20. Mamá se va a ver una peli de mayores con Parrulín
Esta actividad no es sólo para mamá, Parrulín viene incluido en el lote, lo bueno de esta actividad es que la película será DE MAYORES! ¿Qué queremos ver? Interstellar. Una peli acerca de agujeros negros, fin del mundo y demás. Tiene buena pinta y será la primera vez en seis años que voy al cine y NO son dibujos animados!!!


Venga, venga, venga, que ya sólo quedan cuatro días de relleno!!!! De momento, os va gustando? Tenemos deberes para el finde?

Mamá de Parrulín y de Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.