Esta niña es una cochina! A su edad, tomando
teta!
Cochina?
Mi hija? En todo caso cochina serás tú! O tu madre! Pero me callé y me mordí la
lengua porque no va con mi estilo meterme en discusiones y menos aún en un
tanatorio. No iba con mala intención, lo sé, pero desde luego no pudo ser más
desafortunada, ni más repetitiva la señora. Era… como una broma para ella y lo
repitió en varias ocasiones, se ve que le debía de parecer muy gracioso el
comentario.
Llegamos
allí agotados después de un larguísimo viaje en metro y una cuesta arriba
horrorosa hasta llegar al tanatorio, yo no podía con mi alma y mis hijos estaban
también agotados y acalorados, les ofrecí agua a los dos nada más llegar, y en
petit comité, sentada con mi amiga y su hermana, la pequeña me pidió teta.
Intenté que cambiara de opinión y dejarlo para casa pero insistía, estaba en un
lugar más o menos íntimo y se la di.
Esta
mujer es vecina del barrio, ella estaba algo apartada y sentada con otra señora
detrás de mí. Desde mi espalda le dice a mi hija que es una cochina! Yo la
verdad que pensé que no había oído bien, pero se lo volvió a repetir y yo opté
por hacer como que no me había enterado. Era como una broma para que la niña se
riera, pero no se reía, y yo menos todavía. A esa edad y tomando teta, si eso ya es vicio, que ya no sirve para
nada. Le comenta a la señora que tiene a su lado y la otra le da la razón.
Y yo, respirando para bajar revoluciones y no montar el numerito.
Es la
primera vez que me ocurre algo tan desagradable, Xoubiña cada vez es más mayor
y procuro no darle en la calle, pero si me pide insistentemente tampoco se la
voy a negar. Como tampoco le negaría un
beso ni un abrazo a ninguno de mis seres queridos estuviera donde estuviera.
Y yo,
que he sido educada en la contención, en el ver, oír y callar que decía mi
madre, en no montar el numerito en ningún lugar (y menos en un tanatorio) pues
eso hice, me callé. Y me pesa, y me indigna tanto que haya sucedido como que me
haya callado. No será la última vez que vea a esta señora (y digo señora por
decir algo) y no sé si la próxima vez le diré cuatro cosas, o le tiraré de los
pelos, o volveré a morderme la lengua y a callarme, aunque me pese.
Os ha
pasado algo así? Os habéis mordido la lengua o le habéis mordido la yugular?
Mamá de
Parrulín y de Xoubiña.
Otro
día más.
Sean
buen@s y felices.