lunes, 21 de marzo de 2011

Dia del padre sin papá

Pasamos el día del padre solitos porque papá tenía guardia. Vaya mierda! Y no se la pueden poner a uno que no sea padre! Aggg
Como él tenía que salir de casa sobre las 9, Parrulín se despertó con el ruido y con ganas de jarana. Así que le dí de desayunar, lo vestí y nos fuimos a la calle. Le había puesto unos vaqueros nuevos y por el camino me avisa que se le caen, efectivamente, se le veía el calzoncillo como a los jovencitos que van enseñándolo todo (que no sea de esos de mayor, por favor!) probé a ponerle mi cinturón que era elástico y dejar que se me cayeran a mí, pero no cabía por las trabillas, así que le compré un cinturón en una mercería. Su primer cinturón! Está encantado con él.
Fuimos a una clase de música al Baby Deli, era la primera vez que íbamos y había oído hablar tanto de ello en la blogosfera de mamis que lo estaba deseando! Fuimos al de Lagasca, y me encantó! El local es precioso, había un violinista para desayunar con los papás y es el instrumento que más le gusta a Parrulín, por lo que la encantadora profe de la clase de música tuvo que convencerle para entrar a clase, que prefería quedarse con el violinista.
La clase duraba 50 minutos, con los padres incluidos, y cuesta 15€ por niño, lo que no me parece nada caro porque cada vez que vamos al teatro tengo que pagar su entrada y la mía y me sale más caro. Había un niño como de 8 meses o así, una nena de 4 años y el mío. Los otros iban con ambos padres, Parrulín y yo solitos. Estuvo muy bien, cantamos, bailamos, tocamos la caja china, las claves y las maracas. Al niño le encantó, estuvo fenomenal todo el rato menos una canción a mitad de clase que había que dar palmas y no quería por nada del mundo. Le dijo a la profe que esa canción no le gustaba nada, y la profe la cambió, así que sin problemas.
Si le pongo alguna pega al local es que cuesta mucho trabajo conseguir salir de allí sin comprarle nada al niño, tras muchas vueltas conseguí salir sólo con una peonza, porque todos los juguetes le encantaban. Je, je! Repetiremos sin duda alguna.
Después dimos un paseo, me dejó entrar en un par de tiendas incluso… Y se nos fue haciendo la hora de comer sin darnos ni cuenta. En el autobús de vuelta empezó a decirme que tenía mucha hambre y no me apetecía ponerme a hacer nada en la cocina, que no es lo mío ciertamente, aunque papá siempre tiene el congelador lleno y una sopita o una carne es realmente fácil de hacer.
Nos fuimos al Mac Donalds! Por primera vez en su vida! Y ante mi sorpresa comió genial los nuggets, las patatas, el yogur y una botella entera de agua! Incluso me hizo caso y se comió primero el pollo y después las patatas! Increible, yo iba por probar y le encantó! El regalito era un coche y estuvo jugando por la mesa durante toda la comida. Al terminar fuimos al baño de chicas ¿y qué hizo? Levantó la tapa del contenedor higiénico, metió el coche y volvió a cerrar! Menos mal que no se enfadó ni nada!
Y al llegar a casa dormimos juntos una maravillosa siesta de tres horas! Que placer! Que descanso!
Después nos fuimos al media markt a comprarle a papá un monitor para el ordenador, llegamos en seguida en el metro, lo encontramos, lo pagamos, todo iba bien y fue muy rápido. Pero después de pagar la armó! Sentado en el suelo de la salida que no quería que pagara la tele y que la devolviera a su sitio ¡inmediatamente! Llorando como un desesperado! Yo, armada de paciencia, mira Parrulín, ya lo he pagado, es el regalo para papá, ya lo sabes “Que no me expliques nada, que lo devuelvas inmediatamente!” Estuvimos como diez minutos así. Bueno, pues me voy a comprar churros, tú te puedes quedar aquí si quieres (los habíamos visto antes de entrar, en la puerta) “Ah, pues yo también quiero” Y se le pasa todo! Así, de repente! Después del numerito que me estaba montando!
Después, como siempre, le expliqué que no podía ponerse así de nervioso, que llorar no sirve de nada y que tiene que tranquilizarse y hablarme bien. Su contestación fue “Ah, pues no sabía yo eso” Aggg, ahora siempre me contesta lo mismo, coge algo del suelo, Parrulín no puedes coger eso que es caca “Ah, pues no sabía yo eso” y así para todo.
Ya era muy tarde cuando llegó papá, pero le estábamos esperando para darle su regalo y le encantó! Estaba tan, tan contento que si pudiera le compraba una todos los meses, ja, ja! De hecho, dormí yo al Parrulín de las ganas que tenía él de instalarlo.
En fin, que fue un buen día, aunque echamos de menos a papá hicimos muchas cosas diferentes y lo pasamos bien.
Mañana más!
Sean buen@s y felices!

2 comentarios:

  1. Me parto con tu niño, me encanta lo de que metió el coche dentro del contenedor higiénico...., qué ideas tienen....

    ResponderEliminar
  2. Y no ha sido la única! Ya van varios muñequitos en buzones de vecinos.
    Lo peor, el día que metió un cocodrilo de plástico en la casilla del jabón de la lavadora y se atascó!
    Un beso gordo a tu bebote!

    ResponderEliminar