viernes, 6 de mayo de 2011

Dia de la madre y día de la hija

El domingo era el día de la madre, por si alguna no se ha enterado a estas alturas, aún hay tiempo para reclamar el regalo! Hace más de un mes que en el cole estaban preparando una poesía para mamá. Un día viene Parrulín a casa y me dice “Mamá, tengo un pepeto” No me digas! Y qué es? “Es una poesía, pero es pepeto” Ah, y cómo dice? “El sol, arriba, las nubes, abajo […]” Si es que es más inocente el pobre!
Tenía poco más de año y medio la primera vez, para el día del padre, que tenía un pepeto. Mira que lo pensé veces, y no entendía nada! Al final tuve que preguntarle a su profe, era un secreto! Ahh! Habla a la perfección, pero algunas palabras que de pequeño decía mal, las sigue empleando, porque se acuerda que de pequeño decía pepeto, a nosotros nos gusta, nos da ternura, y nos recuerda el bebé que fue. Desde entonces una tarjeta de felicitación y/o un regalo es un pepeto.
Total, que me levanto el domingo y ni el niño ni el padre me dicen una palabra, buuuu, no se acordaban! Pero bueno! Tuve que decírselo! Parrulín, es domingo, es el día de la madre, ¿tienes un abrazo y una poesía para mí? Tuvimos abrazos, besos y poesía. “El sol, arriba, las nubes, abajo […]” Y va corriendo a decirle a su padre que felicite a mamá, que es el día de la mamá. Respuesta del poco-tacto de mi marido: ¿Otra vez? Así, literal. Menos mal que mamá prevenida (y conocedora de su marido) vale por dos y me había comprado un auto-regalo muy bonito, un colgante de sargadelos (es de imitación, pero lo parece). Desenvuelto haciendo el paripé ¿qué será? Ala, qué bonito! Me encanta!
Lo visto y ala! A la calle! Que como es domingo comemos en casa de la abuela. ¿En casa de la abuela? ¿La abuela? Ay Dios mio, pero si es mi madre! Que se me había olvidado! Vaya hija soy! Y mi hermana embarazadísima! Pero si ella me regaló a mi cuando estaba embarazada! Que se me ha olvidado también! Vaya hermana soy! Recuerdo que es mi día y se me olvida que es el día de las madres o pronto-madres que hay a mi alrededor!
Venga, pues paseíto al Vips para que lo puedan cambiar si no les gusta. El Vips abarrotado de gente. Se ve que muchos lo dejamos hasta el último momento. A mi madre le compré el último libro de…  ahora no me acuerdo, pero sabía que le iba a encantar. Hecho. A mi hermana quería comprarle el Bésame mucho de Carlos Gonzalez. Pero no estaba. Cogí un ramo de flores, por si acaso, si no, a mi madre se lo doy también. La cola para pagar era larguísima. Mientras tanto Parrulín iba y venía por todo el Vips “Mamá, me compras un regalo que he sido muy bueno?” A ver, cariño, hoy es el día de la mamá y tenemos que comprar un regalo a la abuela y a la tía M que va a ser mamá pronto, pronto. “Y a mi también!” Lo dejamos para después, ¿te parece? “Mamá, y qué tal esto?” Y coge un mini-perrito de peluche carísimo. Parrulín, es que es el día de las mamás. “Ah, y qué tal esto?” Y coge unos vestidos de muñeca. Que no, cariño, que hoy no te voy a comprar nada, y además es de niña! (No es que me importe, pero sirve como excusa si lo que pretende comprar es rosa) “Mamá, mira, Hello Kitty, me lo compras, que es muy bonito?” (Otro de niñas?) A ver, es el día de las mamás, no el día de los juguetes, ni de los peluches, ni de Hello Kitty, hombre, pórtate bien, por favor. Así, más de media hora, hasta que me toca pagar. Es entonces cuando Parrulín coge un lápiz relleno de lacasitos, le abre la tapa y tira la mitad al suelo. En fin, pues ya tienes regalo. Señora, cóbreme esto también por favor que el niño ha tirado la mitad al suelo. Ains!
Qué estrés de día de la madre por Dios! De todo el lápiz se comió dos lacasitos, el resto fueron cayendo al suelo en diferentes momentos de la mañana. Al ir a casa de mi madre ví que estaba abierta una librería del barrio, así que le dejé que le fuera dando de comer al niño y ahí sí encontré el libro para mi hermana. Al final tuve el regalo perfecto para las dos. Como había muchas ofertas muy baratas le compré al niño tres cuentos, Te quiero mami y Te quiero papi son dos libros de osos con unas preciosas ilustraciones de cosas que hace el bebé oso con su mamá y con su papá (creo que me gustan más a mí que a él) y le compré también un libro de excavadoras. Le encantó! El de las excavadoras, digo. Me lo hace repetir mañana, tarde y noche, estoy de las excavadoras hasta el moño! Distingue la excavadora, el bulldozer, la apisonadora, la máquina martillo, el camión volcador, la grúa y la hormigonera. Además, cómo se aprovecha el niño “Mamá, cariño, me lees el cuento de la excavadora?” Y como hace muy poco que me llama cariño, y me emocioné la primera vez, pues ahora lo aprovecha todo el rato. Cariño-excavadora. Van unidos los dos conceptos.
Y, como anécdota final, y para sacaros una sonrisa, contaros que ayer le regaló una gran amiga recién venida de México una preciosa camiseta. Le dice que le ha traído un regalo y contesta Parrulín “Que bien, me encantan los regalos!” Lo abre, dice que le gusta mucho la camiseta y salta… “y además está planchada! Ves mamá” Ja, ja, ja!
El lunes más!
Sean buen@s y felices!

9 comentarios:

  1. jajaja.. me encanta parrulin¡ Que detallista con la camiseta.. si esta planchada y todo ;D¡
    Y te llama cariño?? ainsss me lo como¡¡
    ¿que tendran las excavadoras, tractores y compañia?? que se vuelven locos

    http://lascosasdemipitufo.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  2. Jajajaj, que bueno!!! Pero que tiene parrulín con las camisetas planchadas? Que grande!!!

    Genial también lo del "pepeto", el nene llamándote cariño, y el "otra vez" de tu marido es digno de enmarcar :-)

    Tu niño es un puntazo, me encanta!

    ResponderEliminar
  3. Los hombres con ese tacto q tanto les caracteriza... "otra vez?"
    Y Parrulín qué mono él con su camiseta planchada!!!
    Por cierto mami, los pepetos no se deben contar, así q para la próxima no le sonsaques información antes de tiempo!!!!

    ResponderEliminar
  4. Ay el pepeto!! Y eso de las camisetas planchadas?? a ver si es que le llevas al niño arrugadito por ahí, jeje.

    ResponderEliminar
  5. Oye, oye, al final el parrulin se llevó cuatro regalos por el dia de la madre, los lacasitos y tres libros!! Si es que son mas listos que el hambre!! ;-)
    http://yoymisminiyos.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  6. jaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa me partooooooooo, lo ves nena? que al final va a haber que coger la plancha o externalizar el tema, que los críos lo largan todo.......me parto con tu niño....es más salado....
    y el vocabulario que tiene? va a ser ingeniero de minas...

    ResponderEliminar
  7. Annie, me llama cariño desde hace poco, porque me lo oye mucho. Hija, es ver una excavadora y emoción asegurada! Irá en la genética masculina?

    Drew, Otra vez? Si, esa fue su frase. No lo voy a olvidar tan fácilmente, se lo recordaré toda la vida, ja, ja!

    Juliete, si vieras la lata que nos ha dado a todos con la poesía del sol arriba y las nubes abajo! A todos y a todas horas!

    Trax, mi ropa está elegida siempre de la que no tienes que planchar, mi marido se plancha solito y el niño sólo si es una camisa y vamos de boda o algo así. Si hay que plancharla no la compro!

    Yo y mis miniyos, los cuentos fueron sin premeditación, porque eran lindos y por la oferta. Los lacasitos por tirarlos al suelo. Al final siempre ganan!

    MdB, me niego a planchar nada, si hay que plancharla es que no está bien pensada la ropa. Mi madre también dice siempre de alguien listo que va a ser ingeniero! Ja, ja! Prefiero arquitecto, y todo queda en casa! El prefiere bombero (actualmente).

    Gracias chicas!
    PD Un montón de comentarios tengo ya y jamás me ha escrito un papá. Curioso.

    ResponderEliminar
  8. Jajajajaj jajajaja jajajaja me encantan tus post!!! Me encanta tu niño, que Gracioso!! Al menos sabias que tu "regalo" te iba a gustar! Jejejej. Espero que a tu hermana le guste el libro, a mi ne ayudo mucho, me dio llel empujón suficiente para decidirme a hacer las cosas como me salieran. Un besazo!!

    ResponderEliminar
  9. Maria, para mí es importante saber que les va a gustar, nunca compro al tun-tun. Carlos Gonzalez para mi hermana espero que le dé un empujón tan grandísimo, que la tire por un barranco, que me parece que le hace falta.
    Un beso.

    ResponderEliminar